la frase "es tan tarde que ya es temprano" me genera un cúmulo de sensaciones tan variadas que me quedo prácticamente catatónica
De la gente que le genera bronca las vacaciones de invierno. A ver, en primera medida: no me digan más qué suerte porque más que suerte es una necesidad. Segundo: en realidad, es un receso. Si la escuela me propusiera reuniones de trabajo, iría súper contenta (en serio), pero esas propuestas no existen; de hecho, las improvisamos con colegas: nos contamos nuestras dificultades y nos damos consejos e ideas. Tercero: yo nunca pediría que le quiten a otro lo que yo no tengo, en tal caso haría algo para también conseguirlo y si no sucediera me la agarraría con el que me niega lo que considero mi derecho, no con quien lo puede ejercer. Cuarto: el trabajo sigue, en las reuniones improvisadas, en planificaciones, en correcciones, bueno... en todo lo que hacemos también los fines de semana. Quinto: aunque no sea mi caso lo menciono. Hay quienes duplican su trabajo como profes particulares, o sea: cero vacaciones. Así que el que me cruce, por favor, calladito la boca.
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