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la gente que se puede conocer en los actos públicos

Fui a mi segundo acto público.

Fui pensando que probablemente era para nada, no creía que estuviera en el listado.

Llegué tempranísimo y le pregunté a un chico si ahí era el acto público de los CENS. Sí, me respondió. Y agregó: pero yo vengo a la secundaria ¿vos venís solo al acto (del 25 de mayo)? Chan, tonta.

Entro. Hago la fila de gente desesperada. Desesperada por hacer la fila rápido como si eso implicara que te dan el trabajo... Y estaba en el listado. Ya me sentía prácticamente titular del cargo.

Elijo una silla e inevitablemente me pongo a hablar con alguien. Una chica y un chico que tenían algunas dudas. Yo a la chica ya la había visto y pensé: "seguro es de lengua". Lo cual es una competencia, pero no por eso rival... Después de un par de palabras, se saca las ganas y me pregunta: ¿vos sos de letras? Pregunta afirmativa y correspondiente puteada: ¡la puta! me ganás porque sos profe, yo soy licenciada. 

Pero pará, la freno, yo tomo solo un curso ¿vos podés tomar el otro? Y se quedó contenta. En cuestión de minutos ya nos sentíamos compañeras de laburo. Ella siguió buscando gente de letras. Yo la tranquilicé y le dije que había mucha gente que parecía, pero que estaba por filosofía. Lo confirmamos cuando se tomaron las horas de esa materia y se levantó la mitad de la concurrencia. 

Nos tocaba. Se informa que se pasa al cargo de lengua y literatura. Y sí, llamaron a otra. Y tomó todas las horas.

Ay, ¡yo ya nos veía ahí!
Y yo ¡casi que te abrazo!

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cansadita

De la gente que le genera bronca las vacaciones de invierno. A ver, en primera medida: no me digan más qué suerte porque más que suerte es una necesidad. Segundo: en realidad, es un receso. Si la escuela me propusiera reuniones de trabajo, iría súper contenta (en serio), pero esas propuestas no existen; de hecho, las improvisamos con colegas: nos contamos nuestras dificultades y nos damos consejos e ideas. Tercero: yo nunca pediría que le quiten a otro lo que yo no tengo, en tal caso haría algo para también conseguirlo y si no sucediera me la agarraría con el que me niega lo que considero mi derecho, no con quien lo puede ejercer. Cuarto: el trabajo sigue, en las reuniones improvisadas, en planificaciones, en correcciones, bueno... en todo lo que hacemos también los fines de semana. Quinto: aunque no sea mi caso lo menciono. Hay quienes duplican su trabajo como profes particulares, o sea: cero vacaciones. Así que el que me cruce, por favor, calladito la boca.

cosas que me di cuenta en las ya lejanas vacaciones de invierno y que recién ahora tengo tiempo de escribir

el pucho no sabe lo mismo sin el estresazo laboral es muy difícil, por no decir insoportable, ver adolescentes disfrutando de... cualquier cosa. las madres son más insoportales que sus niños ¿cuándo comenzó la cultura de ceder el asiento a "pequeños" de entre 8 y 12 años? yo me tomaba el 26 con mi hermana y sufríamos de codazos y asfixia. ah, y le cedíamos el asiento a los viejecitos, qué educadas volver y que el segundo trimestre aún continúe = desorganización, caos, desorientación temporal.